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Pobre México, tan cerca de los EEUU y tan lejos de los ideales de
independencia, dignidad y rebelión
Pedro Echeverría V.
1. Hoy somos un país dependiente, sumiso y jodido pero, ¿de qué nos
quejamos con gran enojo, por qué tanta alharaca, si siempre lo hemos
sido? Desde que en 1821 firmamos el acta de independencia respecto a
España los ingleses y los gringos (éstos usando al embajador Joel
Poinsett y la Doctrina Monroe, comenzaron a intervenir y a someternos
a sus intereses. ¿Se olvida que las logias masónicas, escocesa y
yorkina –ésta que dirigía el embajador yanqui Poinsett- funcionaron
como verdaderos partidos al servicio de Europa y de los EEUU? ¿Puede
olvidarse la guerra de Texas y luego la invasión yanqui de 1847-48 que
sometió a todo el país, que sufrió el izamiento de la bandera gringa
en el Zócalo de la ciudad de México y que luego mediante acuerdos
firmados obligó a México a entregar más de la mitad del territorio
nacional? ¿Acaso no desde entonces los yanquis nos impusieron su
modelo de país?
2. ¿Puede silenciarse que el mismo Juárez tuvo que agradecer el apoyo
yanqui durante la llamada guerra de Reforma (1858-60) contra los
conservadores y la iglesia y firmar con ellos el llamado Tratado Mc
Lane –Ocampo de 1859 que otorgaba privilegios al gobierno yanqui cuyo
cobro quedó pendiente en la historia? ¿Puede por otro lado olvidarse
que la misma dictadura de Porfirio Díaz despojó a indígenas de tierras
comunales –siguiendo las mismas leyes juaristas de Reforma, las de
desamortización y nacionalización- que dieron paso al terrible
latifundismo porfiriano que privilegio a terratenientes extranjeros,
entre ellos yanquis? Hasta aquí me he referido al siglo XIX
recordando, a vuelo de pájaro, sólo sucesos muy conocidos sin olvidar
otros como la solicitud al gobierno gringo de los hacendados yucatecos
para que ingresen a México para asesinar indígenas rebeldes de la
llamada guerra de Castas.
3. ¿Se olvida que los yanquis ayudaron a derrocar a Díaz porque éste
impulsaba capitales europeos para evitar el dominio total de los EEUU?
Después, ya nadie puede olvidar los sucesos de la llamada Decena
Trágica (del 9 al 19 de febrero de 1913) cuando el embajador de los
EEUU organizó el derrocamiento del presidente y vicepresidente de
México y su asesinato posterior. ¿Podría silenciarse que durante dos
años (de 1914 a 1916) barcos de guerra yanquis intimidaron desde aguas
veracruzanas a México para que la futura Constitución política de 1917
no tocara intereses yanquis en México? ¿Y todas las presiones yanquis
exigiendo la renuncia de Carranza a la Presidencia, así como los
llamados Tratados de Bucareli y de Huerta-Lamont (1923) para obligar a
Obregón a hacer concesiones sobre propiedades del subsuelo a cambio de
que sea reconocido por el gobierno estadounidense?
4. De 1926 a 1929 la gran guerra civil cristera sacudió a México
porque la iglesia no estaba de acuerdo con la Constitución, a la que
acusaba de persecutoria. Fue una guerra terrible en la que murieron
muchos miles de indígenas levantados contra el gobierno provocador de
Calles pero también manipulados por el clero y la derecha nacional.
Los EEUU no dejaron de operar haciéndose pasar de imparciales cuando
armaban a los dos bandos. El embajador yanqui se movía como pez en el
agua y luego apareció como el concertador de la paz en 1929. ¿Puede
olvidarse que la entrada de México a la guerra en 1941 respondió a
requerimientos yanquis que también ese año, después de armar a
“aliados” y alemanes, se lanzaron para destruir al enemigo, pero sobre
todo para intimidar al mundo con las bombas atómicas arrojadas en
Hiroshima y Nagazaki sin ninguna necesidad?
5. Terminada la gran guerra (1939-45), al siguiente año asumió el
gobierno de México Miguel Alemán, convirtiéndose en el sexenio más
entregado a los planes imperialistas de los EEUU. Alemán fue el primer
gobierno de México hecho al modelo yanqui y fue el que se encargó de
abrir de par en par las puertas de México a las necesidades de los
gringos. Fue tan grande el entreguismo que en su sexenio (1946-52) las
películas, la radio y la TV (que apenas nacía), tenían como contenido
películas, música, publicidad, inversiones, etcétera, con las que se
reafirmó el modelo de vida de los EEUU. De tal manera que cuando López
Mateos asumió el gobierno (1958-64) quisieron obligarlo a condenar la
revolución cubana y a romper relaciones con ella, tal como lo hicieron
todos los países de América; el presidente demostró dignidad y ese
acto le dio mucho prestigio internacional. Luego fue un Echeverría
Álvarez y un poco López Portillo.
6. Pero la política del país y su dependencia respecto a los EEUU se
hace ya total a partir de 1982 con la implantación del neoliberalismo
y la privatización abierta. Los gobiernos del PRI (De la Madrid,
Salinas y Zedillo) y los del PAN (Fox y Calderón) gobernaron sus
sexenios como agentes yanquis en la Presidencia. En 1982 los yanquis,
por medio del Fondo Monetario Internacional –ante la profunda crisis
económica de México provocada esencialmente por el desplome de los
precios del petróleo- le impusieron al país una llamada “Carta de
Intención” donde lo obligaban a obedecer una serie de lineamientos
privatizadores, de suspensión de inversión social y de venta de las
empresas estatales con el fin de que el Estado se “adelgacé” vendiendo
todo a los capitalistas privados. Al gobierno mexicano sólo le ha
quedado obedecer todas las indicaciones del gobierno yanqui recibiendo
un presupuesto totalmente atado.
7. Como podrá verse en esta relación esquemática y muy general de
intervenciones yanquis que desde 1821 ha sufrido México. No ha
existido ni un solo gobierno que se plante frente a los yanquis para
exigir respeto a la soberanía e independencia del país. Algunos
presidentes como Cárdenas, López Mateos, Echeverría y López Portillo
salieron con discursos independistas y de apoyo –aunque fuera tibios-
a luchas antiimperialistas de los pueblos; pero desde el embajador
Joel Poinsett hasta el actual Carlos Pascual no han dejado de
intervenir en México pensando en que son el otro gobierno de la
nación. Así como hace unos días los yanquis introdujeron dos mil armas
a México y el día de ayer 13 de marzo el embajador yanqui se trasladó
a Ciudad Juárez para ordenar a militares mexicanos y yanquis lo que
debían de hacer. El gobierno de Calderón apareció como inexistente.
¿Quién manda en México?
http://pedroecheverriav.wordpress.com
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